El fagot lo lleva a Francia
Hugo Coutiño ha convertido el fagot en el instrumento de su vida.
Por R. Villaseñor
La música es un camino bello y suntuoso. Quien decide entregarse a los placeres de Orfeo está condenado, de alguna manera, a nunca renunciar a ellos. No se trata de una profesión nada sencilla, quien decide dedicarse a la música sabe que se requiere de sumo compromiso, disciplina y entrega.
Hugo Fernando Coutiño Muñoz nació en Mérida en septiembre de 2001. Aunque desde muy pequeño junto a su familia residen en Cancún. Comenzó sus estudios musicales a la edad de 14 años en la escuela de música Esperanza Azteca, y desde entonces la música ha sido parte inherente de su vida. Actualmente forma parte de la Orquesta Sinfónica Esperanza Azteca de Quintana Roo, donde continúa con sus estudios, aunque muy pronto emigrará al Instituto Superior De Música del Estado de Veracruz.
Hugo nos concedió cordialmente la presente entrevista para poder conocer un poco más sobre el fagot, instrumento que ha convertido en el instrumento de su vida y que lo llevará este verano a Francia.
EP.-Eres un músico muy joven, ¿cuándo empezaste a tocar?
H.C.– Comencé a la edad de 14 años, aún me encontraba estudiando la secundaria, fue gracias a un amigo con el cuál fui a una fiesta y después de escuchar como ejecutó dicho instrumento me fascinó y el mismo me comentó de la vacante que existía en la escuela de música Esperanza Azteca. Al principio cuando yo inicié deseaba cambiar de instrumento, fue en poco tiempo que decidí no hacer cambios y me termine enamorando de “ella” (como conoce a su fagot).
EP.- ¿Por qué elegiste el fagot?
H.C.- Yo no sabía nada de música, entré de ceros a la escuela y fue con el fagot que empecé aprender a enamorarme de su sonido y así hasta cumplir ya cuatro años en los que viajado por diferentes ciudades y ahora viajaré con ella a un país romántico.
EP.- ¿Qué te inspira a estudiar música?
H.C.- No es tan común y se desconoce mucho, no tenemos tanta cultura para poder diferenciar entre un talento o querer ganar dinero fácil. En cambio si uno pone su alma, corazón, esfuerzo podrá hacer una carrera exitosa y ser parte de alguna orquesta, me gusta cambiar la percepción de las personas y que no solo piensen que es hacer música solo por hacer.
EP.- ¿Qué músico te inspira?
H.C.- Juan Carlos Villaseñor, él es fagotista, sin duda el mejor del país. Ha trabajado para la Orquesta Filarmónica de Berlín, es una persona muy amable y me ha aconsejado a seguir caminando por mis sueños.
EP.- ¿Cómo fue tu primer concierto?
H.C.- Fue en vísperas decembrinas, ejecute mi instrumento junto a mi maestra de música, Marbelys Colebrook, hoy directora de la escuela Esperanza Azteca, estaba nervioso pero si yo me complazco sin duda complaceré al respetable. Me preparé un año para poder llegar a ese momento y fue mi primer paso de un sueño que tenía desde que empecé mi carrera.
EP.- Hugo cuéntame… ¿Cómo se dio esta oportunidad para que viajes a Francia?
H.C.- Hace unos meses me encontraba en mi clase en la Casa de la Cultura, me encontraba preparando mi concierto de solistas y fue un compañero que me comentó que si me gustaría ser auxiliar en una orquesta, yo dije que sí… al final solo se restó a decirme que debería irme a Francia y la invitación llegó por parte de dicha orquesta que toca en Niza.
EP.- Cuéntame ¿qué otra cosa te hubiera gustado estudiar?
H.C.- Siempre me ha gustado el arte. La música está en mí y quizás hubiese querido ser bailarín. ●