Al menos 30 mil personas padecen ludopatía en Mérida.
Al menos 30 mil personas padecen ludopatía en Mérida.
La adicción al juego afecta principalmente a las mujeres
Por Leandro Chacón/Mérida
Datos proporcionados por la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY), así como de los Centros de Integración Juvenil, indicaron que la adicción al juego es un trastorno que padecen alrededor de 30 mil personas en Mérida, una problemática que afecta principalmente a las mujeres, que tienen aproximadamente 45 años, las cuales no trabajan o reciben dinero de sus parejas.
En ese sentido, Daniel Solís Santamaría, maestro en psicología aplicada en el área clínica para adultos, mencionó que la adicción al juego, también conocida como ludopatía, es un trastorno en el cual una persona tiene una urgencia psicológica por apostar, misma que se vuelve crónica o un vicio, que al paso del tiempo, afecta de manera significativa la vida familiar, laboral y social.
El especialista en salud mental, señaló que como en el caso de otras adicciones, si este trastorno –la adicción al juego- no tiene un acompañamiento o tratamiento profesional, este puede avanzar progresivamente y empeorar conforme pasa el tiempo, lo que puede derivar a complicaciones en la persona y en su entorno.
Indicó que algunos rasgos de la ludopatía son cuando la persona tiene una preocupación constante por apostar, es decir, un pensamiento que la mayor parte del día está en la mente del individuo; así como una ansiedad creciente por querer jugar cada vez mayores cantidades de dinero en los lugares donde realiza su adicción.
“Como en el caso de muchas adicciones, por lo general hay un fracaso al tratar de controlarlo y tiende a haber recaídas”, indicó Solís Santamaría, quien comentó que una vez detectada la adicción lo recomendable es además de una orientación psicológica, un tratamiento médico, es decir, farmacológico.
Respecto al tema, explicó que en cuanto al acompañamiento psicológico el objetivo es que la persona deje el juego de manera gradual, a fin de evitar un síndrome de abstinencia, es decir, evitar la ansiedad por apostar. “Apenas se identifiquen los primeros síntomas, se debe buscar apoyo, ya que de lo contrario, existe una alta probabilidad de incurrir en actos ilegales, actos que pueden dañar las relaciones personales”, agregó.